jueves, 11 de mayo de 2017

Murumendi (868 m) e Illaun (826 m)

29/03/2017
Hay que aprovechar un poco el día que parece quiere aguantar. Sin muchas pretensiones de ir muy lejos buscamos algo por 'casa' y que sea un poco distinto a lo que hayamos hecho. 
Buscando y rebuscando creemos que nunca hemos salido desde el embalse de Ibai Eder. Ya tenemos el desde donde, ahora hace falta el qué y cómo.
Y vemos factible subir al Murumendi desde aquí. Como queremos hacer una circular buscamos cómo alargar un poco la salida. Vemos que hay un GR que va hasta el alto de Santa Ageda y que de aquí podemos ir al Illaun, bajar a Beizama y del pueblo al embalse. Todo muy bonito y perfecto sobre el papel, pero luego la realidad resulta otra. Todo fue relativamente bien hasta llegar a Beizama y buscar la bajada al embalse. Viejos caminos que desaparecen, una pena, pero nuestra insistencia tuvo su fruto y finalmente dimos con un camino y evitamos bajar por la carretera.

Nuestra ruta: aquí

Dejamos el vehículo en la presa del embalse y empezamos a caminar por el sendero balizado que lo bordea


 Tranquilo y relajante paseo


Cruzamos la parte opuesta por un puente

Y poco más adelante dejamos el plácido sendero para empezar a subir por una pista. Lo mejor es que el bosque está con un colorido fantástico


Pasamos por alguna borda, mas adelante por un agroturismo, seguimos por el bosque, un momento de incertidumbre, cruzamos un barranco

Y salimos del bosque en las proximidades del Murumendi

Poco que decir de esta cima, en la cual ya hemos estado en varias ocasiones, pero como siempre ofrece unas buenas vistas

Picoteamos un poco protegidos del viento e iniciamos el descenso por el GR en dirección al alto de Santa Ageda. Distinta desde aquí la visión del Murumendi

Llegamos al alto, seguimos un rato mas por las marcas, para luego dejarlas e ir hacia un collado con una langa

Momento en el que dejamos el camino y vamos hacia la cima del Illaun


De la cima bajamos al pueblo de Beizama, en el que se respira tranquilidad. Y aquí anduvimos un rato buscando el camino de regreso al embalse de forma lo mas digna posible, aunque un cacho de asfalto es inevitable