Fin de semana familiar y con el permiso pequeña escapada al balneario para hacer otra de las vías abiertas por los de Sendero Límite en la pared de la cascada de Bachimaña.
A pesar de que la aproximación es algo larga, vía que merece la pena, escalada de placer, bastante agradable, con sólo un paso complicado, un diedro que echa un poco para atrás y en el que hay que apretar un poco. Otra alternativa más en esta zona en la que no suele haber mucha gente, y eso que nos sorprendió encontrarnos con varias cordadas, normal en las fechas en las que estamos.
Nuestra impresión sobre la vía:
L1, fácil placa tumbada con numerosos agarres y rugosidades curiosas, este largo se puede evitar subiendo por la pedrera. La mayoría de los seguros son puentes de roca, los cordinos están ya justillos.
Travesía por repisa herbosa a la izquierda protegido por 2 chapas hasta llegar a una placa. Nuestra vía es la primera línea de chapas que vemos.
L2 y L3 del mismo pelo, un poco más vertical pero muy disfrutones. Se pueden empalmar si se llevan bastantes cintas, nosotros preferimos hacer los 2 largos porque igual roza la cuerda mucho
Travesía hacia la derecha protegida por 2 chapas hasta llegar a un espoloncillo en el que vemos una cinta morada y una flecha que nos indica por donde debemos de ir.
L4 iniciar el espolón por la derecha y luego recto
L5, el largo clave de la vía, una pequeña travesía a la derecha para colocarnos bajo un diedro. Paso duro al meternos en el diedro pero bien asegurado
L6 placa tumbada con buenos agarres y seguros algo mas alegres. Reunión en un pino.
De nuevo una travesía por una repisa a la derecha, nuestra vía es la última de todas después del desplome
L7 travesía ascendente a la izquierda, algo rara e incómoda para seguir hacia arriba con algún paso raro.
L8 trámite para llegar a la última reunión cerca del refugio
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