Parece ser que este año las cosas no quieren salir como deberían de hacerlo. Por fin las vacaciones y y tomando decisiones a última hora, apretando el culo de mala manera para buscar un sitio donde ir ya que los planes se han ido definitivamente al traste.
Así que con un plan alternativo nos plantamos en Somiedo. Hacía mucho tiempo que queríamos ir por esta zona que nos pilla un poco lejos ya que habíamos oído hablar bien de ella, sitio tranquilo, con bastante monte por recorrer, incluso alguna vez nos acercamos un poco pero desde la parte de León, así que aprovechando la ocasión nos vamos a pasar unos cuantos días.
Aterrizamos en Villar de Vildas, una pequeña localidad rural asturiana con algún galardón por su conservación (gracias Manolo y Josefina por vuestros consejos y por vuestro trato, casi como estar en casa).
Como no nos apetece mucho coger el coche tras la kilometrada decidimos salir desde el mismo pueblo. Amanece un día gris (lo cual va a ser casi la tónica) pero nos decidimos a ir hasta donde podamos.
Datos de la ruta aqui
Salimos del pueblo por la PR AS 14.1 que recorre le vale de Pigüeña.
Hasta llegar a las brañas de Pornacal, curiosas
Seguimos el camino hasta llegar a la Braña Viella o de los Cuartos. Aquí acaba la pista y se recorre el valle hasta llegar a un collado o Puerto de los Cerezales al fondo del mismo
Poco a poco parece que quiere despejar
Las nubes juegan con los Raxos
Del puerto se ve por primera vez el Cogollo. Cuando llegamos no se ve nada, pero decidimos continuar. a partir de aquí no encontramos senda
Ultima parte empinada
No se puede continuar para la otra vertiente ya que es una zona restringida por el oso
El bonito Cornón
En lugar de volver por el mismo lado decidimos ampliar la vuelta bajando por otro lado. nos encontramos con esta curiosa ranita
Los Raxos
Bajamos por el mismo lado para llegar al pueblo, de nuevo entre nubes amenazantes
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