miércoles, 19 de junio de 2019

Vignemale (3299 m), Cerbillona (3248 m) y Pic Central (3225 m)



No sé ni cuántas veces hemos intentado subir el Vignemale, se trataba de un monte maldito para nosotros, siempre que íbamos nos coincidía con mal tiempo, era algo más que una espina clavada, y había que quitársela en algún momento.
Cogemos sitio en el refugio de Baysellence con tiempo y rezamos a todos los dioses para que esta vez sea la definitiva. Toda la semana mirando la meteo, parece que va a ser que sí esta vez.
Pero parece que no hemos sido buenos. Llegamos a Lourdes y nos recibe lloviendo de mala manera. Seguimos para adelante, parece que para un poco, vamos hasta Cauterets, paramos en la oficina de turismo y miramos la previsión; para el sábado nublado pero el domingo sol. Dudamos porque la cosa no pinta bien y definitivamente con alguna que otra marcha atrás llegamos a Pont d'Espagne. La situación no es muy halagüeña  no se ve a mñas de un palmo y no parece que vaya a despejar, pero al final nos decidimos a subir.
Afortunadamente el camino es fácil de seguir porque la visión es totalmente nula. llegamos a Oulettes de Gaube, más bien nos lo encontramos, y la situación no mejora. Seguimos hacia la Hourquette, la cosa se complica porque aparece la nieve y a duras penas se ve la huella, hay algún momento de incertidumbre pero recuperamos el buen camino. Casi llegando al collado como si fuera un fantasma, se despeja un momento y aparece una visión





Llegamos al collado y justo se vuelve a tapar, de nuevo sin visibilidad llegamos por intuición al refugio
Refugio casi abarrotado, buena señal

Tras pasar una noche sin muchas glorias amanece un día espectacular, nuestra apuesta ha salido bien. Desayunamos y cogemos los bártulos y salimos temprano, no queremos encontrarnos con mucha gente ya que puede ser un colapso.



Dejamos atrás el refugio y bajamos un poco por el GR. en una revuelta lo dejamos y cogemos una senda a media ladera un poco incómoda. Llegamos a la nieve, parada técnica y con lo crampones puestos subimos hacia el glaciar

Desde aquí sigue la huella y a la gente, no hay pérdida





Superadas unas rampas nos ponemos en la parte superior, desde aquí ya se divisa el Pique Longue. Hemos pasado a varias cordadas y parece que de momento no hay mucha gente. Ya solo con estar aquí con este día merece la pena, casi se saltan las lágrimas


Nos plantamos en la base de la montaña. Se puede subir casi todo por nieve. Como todavía no ha calentado la nieve está dura así que con precaución vamos subiendo, pasando a la gente por donde se puede



 



No nos entretenemos mucho en la cima porque empieza a haber demasiado movimiento y hay atasco tanto para subir como para bajar, afortunadamente lo conseguimos evitar.
Ya que estamos por aquí no hay que perderse las cuevas de Russell


Y hacer alguna otra cima sin gente




Volvemos al refugio donde paramos a comer. Las marmotas campan a sus anchas

Y de vuelta a Pont d'Espagne viendo lo que no habíamos podido ver a la subida




Una de los sitios más bonitos de pirineos


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